El
carácter fantástico o realista de Ondine
está construido desde la exclusiva composición del plano, sin presencia alguna
de efectos visuales ni de retoques digitales en la imagen. Su director, Neil
Jordan, recurre a menudo a variar los elementos dentro de un mismo cuadro
para que su lectura cambie de forma automática. Una silueta oscura frente al
mar o un hombre con una navaja. Un paisaje idílico de Irlanda o una cala de
pescadores con barcas varadas. Una selkie
en su elemento natural o una mujer que toma el sol en la costa. La libertad del
cineasta convierte a Ondine
en un pequeño experimento sobre la ambigüedad del séptimo arte, la ambigüedad de la percepción humana.
Ondine. Director y guionista: Neil Jordan. Intérpretes: Colin Farrell, Alicja Bachleda-Curus, Stephen Rea, Tony Curran, Dervla Kirwan. 111 minutos. Estados Unidos/Irlanda, 2009.
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